La pasada semana, una patrulla de la Policía Local de Jumilla detenía a dos ciudadanos acusados de un presunto delito contra la seguridad vial, al conducir bajo los efectos del alcohol, con una tasa de alcoholemia que duplicaba los límites permitidos, y además, resistirse a los agentes de la autoridad, en un forcejeo que dejó a tres de los agentes implicados heridos tras la detención.
Los hechos tenía lugar en la Calle del Calvario, cuando una patrulla se percató del comportamiento extraño de circulación que estaba realizando un vehículo, invadiendo repetidas veces el carril izquierdo y con claros síntomas de embriaguez.
Cuando los agentes dieron el alto policial al turismo, efectivamente, comprobaron que tanto conductor como copiloto, se encontraban bajo los efectos del alcohol, y una vez realizara la prueba correspondiente, el alcoholímetro arrojó en el conductor una tasa de 0.76mg/l de alcohol en aire expirado. Cuando los agentes se disponían a realizarle la segunda prueba de detección, se inició la resistencia de los finalmente detenidos, que se saldó con tres de los agentes que intervinieron heridos, fruto de los arañazos, patadas y mordiscos que los detenidos propinaron a los policías, durante la detención.
Los autores de los hechos serán ahora juzgados por un delito contra la Seguridad Vial, con atentado a los agentes de la autoridad, además por otra parte, sobre uno de los detenidos, recae una orden de expulsión de mayo del 2013, sobre la que también será juzgado.
