El año 2014 se ha caracterizado, para el grupo municipal socialista, como un año lleno de insultos, descalificaciones, falta de dialogo, y desprecio a lo que representamos los concejales y concejalas socialistas. No ofende el que quiere, sino el que puede. El alcalde y su equipo de gobierno han tratado de callarnos la boca, una y otra vez, en las Comisiones y en los Plenos. El alcalde no respeta el reglamento municipal, ha hecho abuso del mismo, impidiendo que desde nuestro grupo se interpelaran y se saliera al paso de falsedades inventadas por el gobierno local.
Lo que hemos propuesto los socialistas ha sido votado en contra por el PP, no por no llevar la razón, sino por venir de la bancada socialista. Hemos presentado numerosas iniciativas a través de mociones, proposiciones, escritos, enmiendas y preguntas para mejorar la convivencia y el futuro socio-económico de nuestra Jumilla, y el PP de Enrique Jiménez no ha hecho ni caso. Este año hemos visto como se ha acentuado de manera notable la soberbia, la prepotencia, el caciquismo y las raíces de derecha pura de los gobernantes de nuestro pueblo.
Es una lástima que se haya perdido la educación, el respeto, la lealtad institucional por parte del equipo de gobierno al practicar una arrogancia y un despotismo típicos de otras épocas. Ha faltado transparencia, nos han ocultado información, no sólo a los ediles de la oposición sino a la ciudadanía y movimientos sociales que han surgido como respuesta a la opacidad y oscuridad de este alcalde que ha hecho de sus formas y de su mala conducta una costumbre en esta legislatura. Ha sido un año retrogrado, involucionista y absolutista, incumpliendo o "desconociendo" el Reglamento de Funcionamiento de los Plenos. El Alcalde debe moderar, no imponer y faltar al respeto a los que no piensan como él.
Prueba de ello, es la falta de respuesta a las más de mil alegaciones que presentaron los jumillanos a la macroprivatización de la basura, y que después de más de 6 meses siguen sin contestar. Aún no sabemos realmente lo que ha costado el monumento a la bandera después de 3 meses ondeando el mayor logro del PP en esta legislatura. "Los que dicen amar tanto a nuestro símbolo nacional, desconocen el valor de la inversión del mismo". No explican en que se van a gastar 40.000 euros de festejos en tan sólo 20 días de final de año, después de incrementar un 137% esta partida presupuestaria.
Existe una sensación de engaño, de gastos innecesarios y de inutilidad total en la gestión de este equipo de gobierno, llevamos años de subidas de impuestos progresivas, el IBI está por las nubes y no hacen nada por rebajarlo, a pesar de haberlo propuesto desde este grupo socialista. Los servicios municipales son más caros, y todo ello se suma a una situación de paro y de falta de protección social de carácter histórico. Son cada vez más las personas y familias necesitadas, y en vez de generar ayudas, Enrique Jiménez y su PP han recortado servicios y prestaciones. Son menos las ayudas sociales, educativas, culturales, deportivas, a la juventud; recortes por todos lados y ellos manteniendo cuatro sueldos, el alcalde y tres concejales liberados más.
Ejemplos más que evidentes son, el engaño en la reapertura de la farmacia del 4° distrito, va terminar la legislatura sin abrirse. El Centro de Día del Alzheimer sin funcionar como es debido. El Centro Integral de Salud del Barrio de San Juan sin hacerse después de varios años y un montón de mentiras. El Colegio nuevo de Infantil y Primaria sin ejecutarse después de darle a la Comunidad Autónoma los terrenos. Menos contratos laborales desde el Ayuntamiento, más privatizaciones, sueldos precarios. Numerosos contratos a empresas de fuera de Jumilla, y a las que son del pueblo como las del nuevo Centro Infantil les hacen contratos leoninos, todo a su riesgo y ventura.
No puede ser que diga el alcalde y su concejala de hacienda que no tienen dinero para nada cuando están dilapidando toda la herencia de nuevos servicios públicos que se encontraron al entrar a gobernar, cuando las deudas de la agencia regional de recaudación, las de la comunidad autónoma con el ayuntamiento y el dinero por ingresar de las sentencias judiciales es mucho mayor que el importe del préstamo que sacaron. Estamos a últimos de año y el presupuesto 2015 sin presentar. En el de 2014 han hecho 17 transferencias de crédito, por valor de 1´5 millones de euros lo que supone una prueba evidente del fracaso en la confección del presupuesto y en su ejecución. No quisieron aprobarnos ninguna enmienda al mismo ni a las ordenanzas, ya dijimos que era irreal y antisocial.
En este 2014, ha quedado patente que el Ayuntamiento no es del pueblo, es de Enrique Jiménez y de su PP. No atienden a los ciudadanos como es debido, no dan respuesta a las demandas ciudadanas, no hablan con la sociedad, no escuchan las verdaderas necesidades de la ciudadanía. Han tratado de lavar la cara de su gestión, medio remodelando tres jardines, poniendo la "primera piedra" de una autovía más por presión de Yecla que de nuestro Alcalde, ya que no vemos que se preocupe del acuerdo plenario por la propuesta socialista de ejecutar la lanzadera desde la A-33 a Jumilla ni por defender la ya histórica demanda de la autovía a la venta del olivo. Más vale que paguen lo que les deben a los propietarios de las parcelas expropiadas en Las Encebras y Román por el paso de la autovía. Pasará lo mismo que con la ejecución del acceso a la Hoya Torres, que ha sido producto de una Moción del grupo socialista y ahora al alcalde le falta pecho para colgarse medallas.
El grupo municipal socialista seguirá haciendo una oposición útil, constructiva, fiscalizadora y controladora de la acción de gobierno, le pese a quién le pese. Nuestra misión es tratar de mejorar las condiciones de vida de los jumillanos, ellos son los verdaderos protagonistas de esta historia.