La alcaldesa de Jumilla, Juana Guardiola, acompañada de los concejales de Obras y Urbanismo y de Economía, Francisco González y Juan Gil, ha ofrecido esta mañana una rueda de prensa con el objetivo de informar y "tratar de tranquilizar a la ciudadanía ante el malestar de algunos vecinos por el inicio de la construcción de una gasolinera 'low cost' y lavadero de coches en avenida de Levante y todo con la mayor transparencia".
En esta comparecencia, la alcaldesa ha asegurado que la empresa promotora cuenta con todos los informes urbanísticos, jurídicos y medioambientales favorables, "por lo que no hay argumentos, ni razones legales para negarle la licencia de obras". Igualmente, ha dejado claro que no se trata de una decisión del Gobierno, "son trámites que se adoptan por ley, totalmente reglados". El edil de Economía y Actividades ha añadido al respecto que: "Si nos oponemos a la construcción de esta gasolinera estaríamos prevaricando y nuestra obligación es cumplir las normas".
Más de dos años de trámites
Los trámites para dar inicio a la construcción de la gasolinera se iniciaron el 22 de enero de 2015 y tras más de dos años, primero para consultar si era posible y luego para tramitar licencias, es cuando se concede esta. Desde que se comienza a tramitar la licencia de actividades, todos los grupos políticos han estado informados del proceso en las respectivas comisiones informativas. Igualmente, se notificó a los dueños de las propiedades colindantes y el expediente estuvo a exposición pública en el tablón los 20 días que marca la ley. "Por tanto, se ha actuado como siempre en estos casos", indica la alcaldesa.
En la rueda de prensa también se ha informado de que se trata de una actividad que no está calificada como contaminadora de la atmósfera y que además está permitida y no está limitada, "todavía más desde el año 2013, por lo que el número de establecimientos de este tipo no tiene límite", indica la alcaldesa, que añade que se trata de una iniciativa privada.
Además, se ha destacado que no se ha recalificado el terreno. "Se trata de un suelo urbano sin consolidar, por lo que mientras no se desarrolle esa unidad de actuación, las normas permiten estos usos. La licencia es provisional, por lo que llegado el caso se retiraría la instalación. La calificación de este suelo está más que clara en el Plan General de Ordenación Urbana, no es nada ambigua".
El pasado miércoles 19, se convocó a una reunión informativa a los vecinos de las tres comunidades cercanas que presentaron escritos el pasado 10 de abril para pedir el expediente y paralizar la obra. "Los vecinos entregaron en ese momento otro escrito en el que señalaban que carecía de sentido esta reunión porque no contaban con información previa, precisamente el objetivo de dicha reunión", ha manifestado Juana Guardiola, lamentando que esa conversación no pudiera llevarse a cabo: "Le dimos al asunto prioridad absoluta, por lo que no es cierto que no haya habido transparencia total. En la respuesta escrita queda claro que tienen acceso a la información que solicitan y en absoluto se les ha negado".
No hay motivos para alarmarse
La máxima autoridad local ha concluido reiterándose en que: "No hay motivos para alarmarse, no somos incautos, tenemos familia, amigos, conocidos que viven en la zona, pero nuestra responsabilidad es cumplir la normativa. Si hubiera peligrosidad ya se hubiera eliminado otra gasolinera que tenemos en el casco urbano y, además, enfrente de un colegio. Nos tenemos que ceñir a los informes técnicos que nos avalan. Si hubiese el menor indicio de que algo no estuviera correcto, que no quepa la menor duda de que no se hubiera dado la licencia".
