Jumilla sigue estancada por la gestión del PP, un equipo de gobierno sin ideas nuevas y las que tienen, en muchos casos, hacen retroceder a la sociedad jumillana.
El gobierno del Partido Popular está elevando la famosa frase de los romanos "Pan y Circo" a la máxima expresión y eso sin que sean ellos responsables del "Pan", puesto que la apuesta por la gran subida del SMI y el cambio de las leyes laborales que hace que los contratos en muchos casos sean fijos es algo que han propiciado las fuerzas de izquierdas en el gobierno central. De las fiestas (del Circo) se puede hablar mucho, pero no bien, pues ha habido muchos gastos sin medida para poco lucimiento. Muchos pasacalles, muchas luces, pero poquísima variedad cultural y siempre repitiendo lo fácil.
En los caminos rurales parece que no va a llegar ni un euro de Murcia en la legislatura, cuando se recibieron 1.200.000 euros en los cuatro anteriores. Hay que explicar claro a Jumilla y al sector agrario que por mucha venta y muchos galones que quiera colgarse el PP se invertirá lo mismo que antes, pero lo pagaremos 100% los jumillanos y jumillanas y 0% Murcia. Mal negocio que todo salga de los bolsillos de aquí y no venga nada de la Comunidad Autónoma, por muchas veces que se invite y agasaje a los responsables regionales.
Los servicios públicos han empeorado notablemente, en los que gestiona el Ayuntamiento y en los que mantiene y acrecienta las privatizaciones. Por un lado, hay menos personal prestando servicios en las calles y además peor retribuido, difícil receta para que mejoren los servicios. Limpieza viaria, recogida de basura y otros servicios no están bien gestionados y Jumilla está bastante más sucia y abandonada que hace años. La otra cara de la moneda la forman las privatizaciones, cada vez más caras, más ineficaces y con menos calidad, como muestra que la contrata de jardines cueste el doble o más de lo que costaba hace tres años, y los jardines estén en igual o peor situación. Se maquilla poniendo unas plantitas cada poco tiempo en los sitios más visibles pero cada vez están peor las palmeras, el arbolado y los jardines alejados del centro, todos completamente abandonados.
Los barrios, pero especialmente lo que siempre se ha conocido como barriadas que no son el centro urbano, están abandonados. Se va a terminar la última calle entre las avenidas Levante y Reyes Católicos, todas las zonas desde calle Cánovas a Avenida Libertad están remodeladas por segunda, tercera y en algún caso por cuarta vez en 40 años y, sin embargo, los barrios tienen calles con uno o dos arreglos en esos periodos.
Respecto a la participación ciudadana se sigue retrocediendo muchos pasos y eso que no se habían dado tantos. Se hace una criba de las inversiones que la ciudadanía pide para escoger las que les interesa al PP, con clarísima orientación partidista y, además, se está haciendo caso de las consignas de la ultraderecha, dejando de apoyar y de visibilizar cualquier causa reivindicativa y social.
No hay proyectos para fomentar el desarrollo económico y social porque no hay planificación de polígonos ni de zonas para desarrollo comercial en la ciudad, no se hace política que de verdad facilite el arranque de actividades de autónomos, de cooperativas o empresas. Tampoco hay una política que facilite a las asociaciones que de verdad se mueven poder mejorar ni desarrollar su actividad y se premia el número de actos que permiten fotos y posibilidades de que el equipo de gobierno se luzca con el menor esfuerzo posible.
En definitiva, el gobierno del PP gobierna solo para el PP y sus intereses electorales, muy lejos de atender las necesidades de la ciudadanía y del progreso del pueblo de Jumilla, que también sigue estancada y ninguneada por el gobierno regional de López Miras.
